jueves, 29 de agosto de 2024

PARPADEA DOS VECES Tan incómoda como inconveniente

Título original: Blink Twice
USA 2024 102 min.
Dirección
Zöe Kravitz Guion E.T. Feigenbaum y Zöe Kravitz Fotografía Adam Newport-Berra Música Chanda Dancy Intérpretes Naomi Ackie, Channing Tatum, Adria Arjona, Christian Slater, Simon Rex, Kyle MacLachlan, Haley Joel Osment, Geena Davis, Alia Shawkat, Levon Hawke, Saul Williams, Cris Costa Estreno en España y Estados Unidos 23 agosto 2024

No le ha resultado fácil a Zöe Kravitz, a pesar de tener un padre tan famoso, llegar a dirigir su primera película. Antes de convencer a productores y exhibidores ha participado en infinidad de proyectos, cortos, videos y largometrajes. Hace unos años, en plena pandemia, le llegó su mejor oportunidad cuando Steven Soderbergh la consideró para protagonizar Kimi. Y ahora consigue encajar su propio guion en una producción multiestelar que aspira con reservas a sentar cátedra sobre un tema tan delicado y espinoso como el abuso sexual hacia las mujeres, una referencia que en sí resulta todo un spoiler pero de la que ya han abusado muchos cronistas y sin la cual se hace imposible analizar ni en superficie este coyuntural producto.

Podemos admirar la determinación de la joven realizadora a la hora de abordar este preocupante problema, y hasta podemos dejarnos seducir por su algo rocambolesca trama en la que estupefacientes, no en vano a la hora del día, consiguen efectos poco deseables para las víctimas, por mucho que secuelas evidentes sean difíciles de olvidar por muy intervenido que estén sus subconscientes. Lo que no podemos aceptar es que Kravitz convierta en espectáculo gore y nauseabundo un drama tan doloroso y delicado, sin concesiones a los sentimientos de quienes lo sufren en la vida real, transformando en un grotesco espectáculo, violento y desagradable, lo que a nuestro juicio debería haber contado con un tratamiento más delicado. Y no hablemos de su disparatado final y su inaceptable conclusión. Sin duda Kravitz ha pecado de inmadura, no obstante sus indiscutibles loables intenciones, a la hora de abordar un tema que reclama un tratamiento más adecuado y respetuoso. Si sus intenciones pasan también por situarnos en una posición incómoda, se puede conseguir con otros recursos menos descarados y faltos de elegancia como los utilizados en su impactante y tremebundo guion.

Cabe admirar el elenco reunido para la ocasión, con recuperaciones notables como las de Christian Slater, Kyle Maclachlan, Haley Joel Osment (el niño de El sexto sentido) y sobre todo Geena Davis. Hasta Lenny, el padre de la criatura, tiene un cameo para los ojos más despiertos. También merece destacarse el cambio de registro, satisfactoriamente abordado, de Channing Tatum, y la atractiva aportación de sus jóvenes protagonistas, Naomi Ackie, descubierta en la serie Small Axe de Steve McQueen y consagrada en el biopic de Whitney Houston, y Adria Arjona, descubierta a su vez en una serie de televisión, Narcos, y vista después en la versión latina de El padre de la novia y en Hitman de Richard Linklater. Sin duda, la propuesta de Zöe Kravitz deja mal cuerpo, pero no con los recursos adecuados.

MAXXXINE Un "giallo" en Hollywood

USA-Nueva Zelanda-Canadá 2024 103 min.
Guion y dirección
Ti West Fotografía Eliot Rockett Música Tyler Bates Intérpretes Mia Goth, Elizabeth Debicki, Michelle Monaghan, Bobby Cannavale, Kevin Bacon, Moses Sumney, Giancarlo Esposito, Lily Collins, Simon Prast, Halsey, Chloe Farnworth, Sophie Thatcher, Zachary Mooren, Ned Vaughn Estreno en Estados Unidos 5 julio 2024; en España 23 agosto 2024

Secuela directa de X, una película ambientada en un paraje apartado de Texas a finales de los años setenta del pasado siglo, en la que el equipo de rodaje de un film pornográfico se enfrentaba al mal, personalizado en el recalcitrante puritanismo estadounidense. El mismo año de su estreno, su director, Ti West, estrenó en plataformas digitales su presunta secuela, Pearl. El desagrado que nos provocó aquel primer film centrado más en el espectáculo de vísceras y sangre y guardando el mismo puritano recelo en mostrar escenas medianamente sexuales, impidió que nos interesásemos por su precuela, si bien estar ambientada sesenta años antes para contar los precedentes de su aguerrida protagonista, provoca ciertamente nuestra curiosidad.

Ahora llega su secuela, manifiestamente más ambiciosa, con la intrépida superviviente de aquella matanza de Texas abriéndose paso en Hollywood, en el cine narrativo puro y clásico, aunque sea a través del género de terror, pero en manos de una realizadora con voz propia y personal, una estupenda Elizabeth Debicki a quien quisiéramos ver en más películas y en papeles de mayor enjundia. Mia Goth interpreta a la peligrosa rubia protagonista y de paso produce también el que sin duda es su mayor vehículo de lucimiento hasta el momento. El pretexto sirve para trazar una radiografía más estética y visual que pretendidamente psicológica de ese Hollywood al que su frase publicitaria identifica como un asesino.

Así, West pone especial énfasis en resucitar el giallo italoamericano, con dosis considerables del cine de Brian de Palma, también deudor, pero con personalidad propia, de ese género italiano tan prodigado en la década de los setenta del siglo XX, con Dario Argento y sus atemorizadas pero decididas y bellas guerreras. Pantallas partidas, música que combina acción, suspense y romanticismo (un logro de Tyler Bates acercándose a Pino Donaggio) y secuencias que directamente evocan a Doble cuerpo, música de Frankie Goes to Hollywood incluida, confirman esta tendencia de la que West sale mejor parado que su disparatado argumento, literalmente desbocado al final de una producción que pese a todo se disfruta, entretiene y divierte, por mucho que nos fastidie que aquello que critica se convierta también en su espada de Damocles, evidenciando tanto puritanismo sexual como descalabro visceral.

martes, 27 de agosto de 2024

UNA PERFECTA NOCHE DE VERANO

XXV Noches en los Jardines del Real Alcázar. Lita Wheel, Laura Serrano y Alba Carrasco, voces; Santiago Ruiz, teclado; Leo Aranda, bajo; Roque Torralva, batería y percusión. Programa: Música a través de la mujer. Lunes 26 de agosto de 2024


El verano invita a relajarse, también en lo musical. Quienes nos pasamos el año analizando y reseñando interpretaciones de música clásica y antigua, encontramos también en esta época de distensión el pretexto para acercarnos a esos otros géneros que cubrieron nuestra cultura musical. Las canciones que sonaron en casa por cortesía de padres y hermanas, que tanto hicieron por adiestrarnos en la dulce afición por la que consideramos la más reconfortante de las artes, forman parte de nuestro acervo sentimental, y de recordárnoslo se encargaron The Donelles, el excelente conjunto vocal e instrumental sevillano que con el de ayer completaron su ciclo de tres conciertos en esta edición de las Noches del Alcázar.

También porque se trata de una época de costumbres nómadas, hemos tenido que esperar a este tercer y último concierto para hacernos eco de lo mucho que valen estas y estos seis músicos, apasionadas del pop fundamentalmente estadounidense desde la década de los cuarenta hasta la psicodelia setentera, pasando por los prodigiosos sesenta. El suyo es un show en toda regla, de esos que se pueden disfrutar permanentemente en plazas tan icónicas como Las Vegas, donde se escenifican con derroche de talento y calidad recorridos similares, especialmente centrados en la historia de la ciudad del juego y el entretenimiento.

Y para adaptarse a una de las líneas argumentales de las Noches del Alcázar de este año, esos nombres de mujer que dignifican el trabajo del género femenino en el noble arte de la música, lamentablemente en la mayoría de las ocasiones desde la retaguardia, The Donelles presentaron en formato reducido, adaptado a las circunstancias de tiempo y espacio, el espectáculo con el que llevan años deleitando a audiencias de toda la nación. En él desglosan algunas de las voces más famosas de la música popular de esas cuatro décadas aludidas, siempre desde el punto de vista de la aportación femenina, a menudo a la sombra del hombre, otras veces como protagonistas absolutas de una historia que sólo han escrito ellas.


Lideradas por la carismática y divertida Litta Wheel, el trío de voces exhibió esa armonía perfectamente conjuntada, cerrada, que caracterizó a conjuntos tan icónicos de la Segunda Guerra Mundial como The Andrew Sisters, a quienes dedicaron un primer y generoso bloque, con éxitos como In the Mood a capela con el sólo acompañamiento de pies y manos de sus compañeros instrumentistas, ese Tico Tico que generalmente asociamos a la portuguesa Carmen Miranda, pero que entonaron al más puro estilo del trío uniformado, y una excitante y divertidísima combinación de Rum & Coca-Cola y Mr. Bassman, mezclando con total desparpajo y desprejuicio los cuarenta con los primeros sesenta.

La gracia y la vitalidad de Wheel combina magistralmente con la sensualidad de armas tomar de Laura Serrano y la elegancia y sofisticación de Alba Carrasco, las tres entonando en perfecto estilo, con hermosos timbres y un evidente buen gusto, para ofrecernos rutilantes versiones de los más latinos Sway y Tu vuo fa l’americano, demostrando que por encima de Dean Martin o Renato Carosone, también brillaron The Puppini Sisters.

Aunque la homenajeada con Runnin’ Wild era Ernestine Anderson, fue imposible no visualizar a Marilyn Monroe cantándola junto a su ukelele y el resto de la banda femenina en el vagón de tren de Con faldas y a lo loco. Una década de los cincuenta completada con la impagable personalidad de Brenda Lee, ya con Wheel como solista absoluta en St. Louis Blues y el melancólico I’m Sorry al que sólo se permitieron añadir unos toques sopranistas de Carrasco.


Que Big Mama Thornton se adelantó al Rey del Rock con su icónico Hound Dog, y que ya en los setenta Sweet Inspiration demostraron que eran más que un conjunto de acompañamiento del mismo Elvis, sólo fue la punta de lanza para evocar a The Beatles con el Mr. Postman original de The Marvelettes. También sonó Help, según versión de The Carpenters, de quienes se hicieron además eco a través de la malograda Karen Carpenter con su particular y dulce versión de California Dreamin’ de Mama’s and the Papa’s. Y no podía faltar un grupo de referencia para el conjunto sevillano, Martha & The Vandellas, de quienes eligieron el exquisito Jimmy Mack, todo un himno de la Motown.

Acompañando, Leon Aranda al bajo, Roque Torralva a la batería, y muy especialmente Santiago Ruiz al teclado, demostraron que sólo desde la excelencia, el trabajo bien hecho y un bagaje profesional extenso y maduro, se puede exigir del público el clamor que ellos disfrutaron. Poder hacerlo sentados, pendientes de cada gesto, cada inflexión y cada apunte de los y las artistas, es un lujo poco accesible en este tipo de manifestaciones, especialmente cuando se trata de estrellas mediáticas y consagradas. Iniciativas como las de The Donelles nos hacen sentir aún más orgullosos de la tierra en la que vivimos.

Fotos: Actidea
Artículo publicado en El Correo de Andalucía

EL HOMBRE BUENO Soso cuarteto a la luz del Mediterráneo

España 2024 79 min.
Guion y dirección
David Trueba Fotografía Ignacio Gabasa Intérpretes Jorge Sanz, Vito Sanz, Macarena Sanz, Aia Pérez Estreno en el Festival de Málaga 6 marzo 2024; en Movistar+ 18 agosto 2024

Que haya tardado tres años en estrenarse, haciéndolo directamente en blue ray y las plataformas digitales, podemos interpretarlo como que dado su carácter intimista y sus modos de ensayo, no encontrara distribución o línea de exhibición adecuada, o que su principal artífice, David Trueba, no estuviera suficientemente satisfecho con los resultados. Teniendo en cuenta que el hermano de Fernando tiene un público ya definido y determinado, que hace que sus películas se sigan con mayor o menor interés, pero al menos con una cuota fija, nos decantamos por la segunda hipótesis, considerando además que nos ha parecido una cinta bastante fallida y definitivamente deshilvanada
Trata la sempiterna crisis matrimonial desde los ojos de quien ha sufrido un trauma sentimental de manual, expuesto todo a la impostura más descarada, los diálogos más artificiosos y la estructura más caprichosa. Algo así como un aria que se convierte en dueto, trío y hasta cuarteto, pero sin la naturalidad, la gracia y la elegancia que destilan los trabajos de Mozart, y eso que todo a lo que aspira es a una naturalidad cien por cien.

Trueba tira del actor fetiche de su sobrino Jonás, toma algo de su estilo aparentemente improvisado, y ofrece el papel protagonista a quien ya dedicó hace más de una década una serie de televisión, ¿Qué fue de Jorge Sanz?. Al final es éste quien sale mejor parado, contenido y sereno, algo mejor de condición física de la que exhibe ahora, frente a un matrimonio tan soso como desorientado al que dan vida el referido Vito Sanz y la sonriente y poco más Macarena Sanz. Desconocemos si tienen entre ellos algún vínculo familiar; creemos que no, por lo que la operación de cásting se nos antoja tan caprichosa e intencionada como todo lo demás. Lo de la niña Aia Pérez mejor ni lo comentamos. 

Quizás el único motivo de la película fue disfrutar de unas vacaciones en los extraordinarios parajes baleares en los que está rodada, lo mejor de la película, y aprovechar la canción del valenciano Raimon Veles e vents, según texto arcaico de Ausìas March, sobre los misteriosos e insondables vaivenes del amor. Y con todos estos ingredientes nos preguntamos si no podría haber extraído un producto más fresco y subyugante.

lunes, 26 de agosto de 2024

ALIEN: ROMULUS Secuela en modo homenaje

USA 2024 119 min.
Dirección
Fede Álvarez Guion Fede Álvarez y Rodo Sayagues, según la saga de Dan O’Bannon y Ronald Shusett a partir de los personajes de H.R. Giger Fotografía Galo Olivares Música Benjamin Wallfisch Intérpretes Cailee Spaeny, David Jonsson, Archie Renaux, Isabella Merced, Spike Fearn, Aileen Wu Estreno en España 15 agosto 2024; en Estados Unidos 16 agosto 2024

Cualquier secuela, y con ésta la saga del octavo pasajero suma ya siete directas, supone un ejercicio indisimulado de estrujar la gallina, pero si se hace bien y se logra al menos entretener y generar la suficiente dosis de tensión, se le puede dar la bienvenida. Es justo lo que ha conseguido el uruguayo Fede Álvarez, tras consagrarse con el remake de Posesión infernal y la ultraviolenta No respires. Ahora se propone como admirador absoluto del ciclo de películas iniciado con Ridley Scott, productor junto a Walter Hill de esta secuela directa de la primera entrega, recreando la atmósfera, el ritmo y la estructura de aquel primer clásico, con guiños también a otros títulos de la saga, especialmente los protagonizados por Sigourney Weaver, de quien la menuda Cailee Spainey (Priscilla, Civil War) se revela sucesora como heroína de turno. De hecho, todos los personajes son considerablemente más jóvenes en esta nueva entrega, adaptándose a la media del público que hoy asiste a las salas a ver este tipo de cintas, pertrechados con los inevitables e impertinentes sets de picnic variado.

El homenaje de Álvarez y su colega Rodo Sayagues, director de la segunda parte de No respires, pasa también por otro título emblemático de Scott, Blade Runner, cuya ambientación parece recrearse en los primeros minutos de la cinta, dotando además a uno de sus personajes del carisma y la sofisticación de los replicantes de aquel título mítico. Pero poco o nada original propone esta película que combina la acción y el terror básicos que hicieron de la cinta del 79 el éxito que perdura, con el gore al que el director se ha prestado en las películas anteriormente referidas. De momento, si hay algo por lo que Romulus deberá ser recordada es por resucitar a un actor ya fallecido y darle cierto protagonismo. Creíamos que algo así sucedería con Monroe o Bogart pero le ha tocado a otro actor menos popular. El ejercicio de homenaje se vislumbra también en la banda sonora de Benjamin Wallfisch, muy respetuosa con la que Goldsmith compuso para Scott y que éste luego despreciaría en un alto porcentaje. A Roque Baños le hubiera gustado mucho comer parte del pastel, tras acompañar a Álvarez en sus anteriores films, incluido el título apócrifo de Millennium, Lo que no te mata te hace más fuerte (The Girl in the Spider’s Web), pero la Fox la habrá impuesto al muy interesante Wallfisch para generar ese sonido inconfundible identificado con el monstruo alienígena.

La trama resulta sin embargo bastante pueril en su afán por subrayar el mito del Prometeo y con ello el atrevimiento del ser humano por adelantarse a su evolución natural. Pero sirve a los objetivos mencionados, aunque en su desarrollo lamentemos más de una solución impostada y difícil de digerir, y es que hasta la ciencia ficción exige algo más de plausibilidad de la que esta película de terror está dispuesta a ofrecer. En el apartado de las curiosidades, destaca el respeto destilado en la dirección artística, atreviéndose a rodearse de artilugios y diseños que hoy resultan obsoletos, pero que entroncan perfectamente con el imaginario previsto en aquel creativo final de los setenta del siglo pasado.

jueves, 15 de agosto de 2024

ROMPER EL CÍRCULO La fuerza y el carisma de Blake Lively

Título original: It Ends with Us
USA 2024 130 min.
Dirección
Justin Baldoni Guion Christy Hall, según la novela de Colleen Hoover Fotografía Barry Peterson Música Rob Simonsen y Duncan Blickenstaff Intérpretes Blake Lively, Justin Baldoni, Jenny Slate, Brandon Sklenar, Hasan MInhaj, Amy Morton, Alex Neustaedter, Isabela Ferrer, Kevin McKidd Estreno en Estados Unidos y España 9 agosto 2024

Sin ser una de las estrellas más cotizadas, y con menos incursiones en el cine de lo que desearíamos, Blake Lively tiene su propia legión de fans que no perdonamos ninguna de las películas en las que interviene, da igual la pinta que tenga. Ella, con su fascinante porte, sostiene fundamentalmente esta cinta que dirige el guaperas Justin Baldoni, que se reserva el controvertido papel de pareja de la protagonista, motor del principal giro argumental de este melodrama romántico y sentimental que intenta volar más alto tocando un tema tan delicado y polémico como el de la violencia machista.

Los tiempos han cambiado y todo ha evolucionado, incluso esta lacra social que ahora ya no se ve como algo de lo que avergonzarse, sino un problema del que empiezan a ser conscientes también los hombres que la ejercen, y que cuenta con el apoyo incondicional de familiares y amistades que antes lo negaban. En esa tesitura, Baldoni a partir de la novela éxito de ventas de Colleen Hoover, teje un manual de superación, tal como lo eran sus anteriores y desconocidas películas, A dos metros de ti y Clouds, aunque aquellas estaban centradas en la enfermedad como catalizadora de emociones y visiones diversas de la vida.

El problema en Romper el círculo es que tira de clichés para montar una historia de amor en la que las canciones, el recatado erotismo de lencería fina, la narración a dos tiempos al más puro estilo Nicholas Sparks, y la permanente gesticulación a ritmo de continuos sorry (perdona) en el guion de manual, domina una función a la que el carisma de Lively y un mensaje tan válido y valiente que merece ser divulgado entre los más jóvenes, da igual cómo sea el vehículo, le hacen merecer nuestra atención. La belleza de su elenco, sus bostonianas localizaciones e interiores de diseño, aportan tanto atractivo como convención a una empresa que entretiene tanto como ocasionalmente ruboriza. Como curiosidad, Isabela Ferrer, que interpreta a Lively de adolescente, parece una versión digitalizada de la admirada actriz, tal es el parecido físico y gesticular.

miércoles, 14 de agosto de 2024

EL CONDE DE MONTECRISTO Un espectáculo suntuoso, elíptico y entretenido

Título original: Le comte de Monte-Cristo
Francia-Bélgica 2024 178 min.
Guion y dirección
Matthieu Delaporte y Alexandre de La Patellière, según la novela de Alexandre Dumas Fotografía Nicolas Bolduc Música Jérôme Rebotier Intérpretes Pierre Niney, Bastien Bouillon, Anaïs Demoustier, Anamaria Vartolomei, Laurent Lafitte, Pierfrancesco Favino, Patrick Mille, Vassili Schneider, Julien De Saint Jean, Julie De Bona, Adèle Simphal, Stéphane Varupenne, Marie Narbonne, Bruno Raffaelli Estreno en el Festival de Cannes 22 mayo 2024; en Francia 28 junio 2024; en España 9 agosto 2024

El éxito de crítica, y de público al menos en su país de origen, de Los tres mosqueteros, ha propiciado que sus guionistas den el salto a la dirección con esta también adaptación de Alejandro Dumas. A pesar de su popularidad, El conde de Montecristo apenas ha disfrutado de adaptaciones cinematográficas destacables. Las más notables datan de 1934, protagonizada por Robert Donat y dirigida por Rowland V. Lee, que un año después realizaría su particular versión de Los tres mosqueteros, 1953 y una producción argentina con Jorge Mistral de protagonista, y 1961 con Louis Jourdan, a las que ahora se suma esta versión algo más dilatada y definitiva de la novela. Más suerte ha tenido en la televisión, donde ha conocido multitud de adaptaciones, muchas de ellas hispanoamericanas, como la que protagonizó Pepe Martín para el espacio Novela de Televisión Española a finales de los sesenta. Pero sin duda la versión más conocida es la que protagonizó también para la televisión Richard Chamberlain en 1975. Justo ahora, el director danés Bille August (Pelle el conquistador, La casa de los espíritus) está a punto de estrenar otra serie, protagonizada por Sam Claflin y Jeremy Irons como el abate Faria.

La densa trama urdida por Dumas en torno a la justicia y la venganza, y de cómo éstas se solapan cuando se nos escapan de las manos, exige una narrativa muy precisa, plagada de detalles y personajes, muy difícil de simplificar sin sacrificar parte de su convicción y credibilidad. La de Delaporte y La Petelliére es generosa en duración, tres horas que tienen el mérito de no resultar pesadas, disfrutarse del tirón como un efectivo entretenimiento, pero acusa la desventaja de abusar de la elipsis. Un trabajo quizás más peliagudo y conciso a la hora de respetar episodios y abandonar otros, podría haber redundado en una mayor plausibilidad de los acontecimientos, a los que se han añadido cuestiones de difícil digestión como es la, por otro lado, imprescindible caracterización del personaje titular.

Aún así, la esencia sigue ahí, por mucho que podamos apreciar cierto desequilibrio entre el drama, la aventura y la fantasía, ingredientes irrenunciables de la novela que quizás con un poco más de humor y ligereza hubieran podido generar un producto más cerca de la convicción que de la convención. Con todo, cabe admirar su suntuosa puesta en escena y maravillosa fotografía, obra de los mismos responsables del díptico que el año pasado se dedicó a Los tres mosqueteros. También merece destacarse el meritorio trabajo del elenco protagonista, con especial mención a los más jóvenes y a un Pierfrancesco Favino oculto tras las barbas y la mugre de Faria. Cabe aplaudir también que siga los episodios escritos por Dumas sin apenas invenciones, más que un par de detalles introducidos precisamente para aliviar esas impertinentes elipsis aludidas. Todo ello da como resultado una propuesta que se disfruta con interés y hasta entusiasmo, un entretenimiento eficaz y muy hermoso.

LA TRAMPA Cuestión de confianza

Título original: Trap
USA-Reino Unido 2024 105 min.
Guion y dirección
M. Night Shyamalan Fotografía Sayombhu Mukdeeprom Música Herdis Stefánsdóttir Intérpretes Josh Hartnett, Ariel Joy Donoghue, Saleka Shyamalan, Hayley Mills, Jonathan Langdon, Marnie McPhail, Mark Bocolcol, Marcia Bennett, Vanessa Smythe, M. Night Shyamalan Estreno en Estados Unidos 2 agosto 2024; en España 9 agosto 2024


Sus detractores se multiplican cada vez más, pero todavía tiene legiones de fans que esperan sus nuevas propuestas con ilusión, lo que no se puede decir de muchos directores. Acostumbrados a que detrás de sus intrigas se esconda siempre alguna metáfora sobre cuestiones de carácter más o menos filosófico, no podemos sustraernos al juego y concluir que en La trampa Shyamalan nos propone una cuestión de confianza. En ella se deposita el éxito de la empresa de un asesino en serie, acorralado por la policía y las fuerzas del orden en uno de esos conciertos multitudinarios que convocan a miles de fans adolescentes y que el director recrea con la máxima exactitud, valiéndose para ello de su propia hija, la cantante y compositora Saleka. En ese entorno transcurre la mayor parte de la trama de esta película que no busca tanto la claustrofobia como la inquietud del espectador frente a cada posible giro que puede dar su argumento en favor de la fuga de un protagonista en el que es fácil reconocer esos monstruos domésticos que a diario ocupan nuestras pantallas de televisión. Tipos normales, incluso atractivos y afables, que esconden una doble vida provocada por algún tipo de trauma, generalmente infantil, que les lleva a invadir de dolor su entorno, a veces el más inmediato.

El asesino busca la confianza de víctimas y adyacentes, incluso de sus propios queridos familiares. La estrella del pop busca la confianza del público, dispuesto a dejarse seducir por su espectáculo y su música. Policía y agentes de seguridad buscan la confianza de ese mismo público y de sus colaboradores para atrapar al asesino. La joven protagonista, la confianza de su padre a la hora de solucionar sus problemas de adaptación y de disfrutar de un espectáculo tan esperado. Pero sobre todo se reclama nuestra confianza para aceptar los continuos giros y vicisitudes que integran su intrincada trama, y dejarnos así arrastrar por uno de esos apasionantes viajes al lado más oscuro del ser humano, así como por una de esas angustiosas tramas que Shyamalan maneja con tanto ingenio como recursos se ponen a su alcance.

El resultado pone al servicio de Josh Hartnett su mejor oportunidad de lucimiento, mientras nos ofrece a nosotros la de reencontrarnos con Hayley Mills, niña famosa en los sesenta gracias a películas como Pollyana o Tú a Boston y yo a California, y que a finales de esa década tuvo sus coqueteos con el thriller en películas como Nervios rotos y Noche sin fin, ambas con música de Bernard Herrmann. El meritorio trabajo de Saleka Shyamalan, tanto como actriz decisiva para desenmascarar al asesino ganándose su confianza, como compositora de sus propias canciones, añade atractivo a una empresa cuya resolución llega de la mano también de la confianza ejercida por el entorno más cercano al vil protagonista. Y lo cierto es que todo da terror.

sábado, 10 de agosto de 2024

CONSTANTINI MARCA LA DIFERENCIA

XXV Noches en los Jardines del Real Alcázar. Claudio Constantini, bandoneón. Programa: Fantasía cromática y fuga en re menor BWV 903, Chacona en re menor BWV 1004 y Toccata y fuga en re menor BWV 565, de Bach; Concierto en re menor BWV 974, de Marcello, arr. Bach; Verano Porteño y Milonga del Ángel, de Piazzolla. Viernes 9 de agosto de 2024


No es la primera vez que el músico peruano afincado en nuestro país, Claudio Constantini, se sube al escenario del Alcázar. Ya lo hizo hace exactamente tres años junto al pianista Federico Lechner y la voz de Florencia Bégue, con un programa íntegramente dedicado al popular compositor argentino Astor Piazzolla. En un momento tan delicado como en el que se encuentra el bandoneón, un instrumento de viento de lengüetas libres a fuelle, que tantos tienden a confundir con el acordeón pero cuya riquísima tímbrica le da un carácter harto particular, Constantini se ha empeñado en reivindicarlo, refrescarlo y darle la dignidad y la categoría que merece. No es nada disparatado que para la ocasión eligiese un programa diseñado fundamentalmente en torno a Bach, protagonista absoluto de su noveno disco recién salido al mercado, dado el origen alemán de un instrumento sin embargo tan asociado a la cultura tanguera del Río de la Plata.

Generado y desarrollado para interpretar música en misas a mediados del siglo XIX, su sonido nos transporta al que exhibe un órgano, lo que le hace ideal para interpretar música de Johann Sebastian Bach fuera de los muros eclesiásticos, respetando su mística y ampulosa sonoridad. Quizás por eso Constantini eligió tres grandes piezas en forma de coral, la Fantasía cromática y fuga, la Chacona de la Partita nº 2 para violín, y la famosa Tocata y fuga en re menor, tonalidad imperante en toda la velada, con la que terminó oficialmente el concierto. Todas estas piezas, más el Concierto de Marcello a partir de la transcripción de Bach, arregladas por el propio intérprete, que en ese mismo 2021 estrenó su Concierto para bandoneón y orquesta junto a la Orquesta Joven de Andalucía en el Teatro Central, donde demostró también lo buen pianista que es enfrentándose a la Rapsodia en Blue de Gershwin.


Un instrumento extremadamente complejo

La versatilidad, compromiso y responsabilidad de Constantini quedaron bien marcados en esta comparecencia ante el público del Alcázar, siempre tan presto a aplaudir que no respetó la continuidad ni de la Fantasía cromática y fuga ni del Concierto de Marcello. Atacó las grandes piezas bachianas con decisión, abriendo generosamente un instrumento cuyas numerosas lengüetas se multiplican por dos para reproducir infinidad de tonos, y dotando así a cada pieza de la monumentalidad que merecen. De esta forma, Constantini se adhirió a la perfección al tono místico de Bach, haciendo alarde de un dominio técnico extremo y una minuciosa capacidad para dotar cada nota de la fuerza espiritual que la música del genio alemán atesora. Particularmente difícil resultó la célebre Chacona, donde el intérprete fue capaz de alternar grandes gestos con otros más reprimidos e intimistas. También el Concierto de Marcello disfrutó de esa dualidad expresiva, con un adagio tan deleitado como decididos y moderadamente agitados resultaron el andante y el presto que lo enmarcan.

Su lectura de Piazzolla sorprendió menos, pero gustó tanto o más, dado el toque melancólico que Constantini es capaz de alcanzar con la melodiosa y armoniosa música del compositor argentino. Extraído de Las cuatro estaciones porteñas, el Verano disfrutó en sus manos de un candor y una belleza inusitada, presente también en la Milonga del Ángel y la fugaz propina con la que el concierto excedió generosamente de su duración estándar. Una dilatación provocada en parte por la profusa elocuencia del intérprete, tan locuaz y ameno en sus explicaciones como entregado e hipnótico resultó en su forma de dialogar con el particular instrumento. Lástima que el bellísimo Oblivion tuviera que ser apeado del programa para no alargarse aún más esta experiencia tan tonificante para el público como extenuante para el excelente bandoneonista.

Fotos: Actidea
Artículo publicado en El Correo de Andalucía

miércoles, 7 de agosto de 2024

LOS TRES MOSQUETEROS: D'ARTAGNAN y MILADY Drama, intriga y aventura a muy buen nivel

Título original: Les trois mousketaires: D'Artagnan et Milady
Francia-Alemania-España-Bélgica 2023 121 y 115 min.
Dirección
Martin Bourboulon Guion Matthieu Delaporte y Alexandre de La Patellière, según la novela de Alexandre Dumas Fotografía Nicolas Bolduc Música Guillaume Roussel Intérpretes François Civil, Vincent Cassel, Romain Duris, Pio Mamaï, Eva Green, Vicky Krieps, Louis Garrel, Lyna Khoudri, Jacob Fortune-Lloyd, Eric Ruf, Marc Barbe, Patrick Mille, Julien Frison, Camille Rutherford, Alexis Michalik, Ivan Franek, Ralph Amousson, Gabriel Almaer, Thibault Vinçon Estreno en Francia 5 abril 2023 (D'Artagnan) y 13 diciembre 2023 (Milady); en España 12 abril 2023 (D'Artagnan) y 26 enero 2024 (Milady)


Cuando está a punto de estrenarse en el cine la última adaptación cinematográfica de El conde de Montecristo, recuperamos este díptico estrenado a mediados de 2023 y principios del año en curso. Se trata de la versión definitiva de la novela de Dumas en manos del país que la vio nacer, bajo la dirección del responsable de la comedia Mamá o papá y el espectacular biopic de Eiffel, Martin Bourboulon. Quienes firman el guion se han encargado ahora de la dirección de este nuevo Conde de Montecristo, mientras el resto del equipo técnico y artístico repite muchos de los nombres que participaron en esta nueva versión de las andanzas de los famosos cuatro mosqueteros. Bourboulon y sus guionistas prescinden del tono cómico con el que abordaron la pieza las más famosas adaptaciones hasta la fecha, la de George Sidney en 1948 y la de Richard Lester en 1974, éste echando mano también del formato en dos partes, aunque luego añadiera una tercera postiza una década después. Podríamos incluir también en este grupo de adaptaciones jocosas la que Stephen Herek realizó en 1993 a remolque del éxito del Robin Hood de Kevin Costner.

Bourboulon, Delaporte y de La Patellière han optado sin embargo por un tono más sombrío y más dramático, sin renunciar por ello al factor aventura al más alto nivel, pero profundizando en la psicología de los personajes, especialmente D’Artagnan, Athos y Milady de Winter, una espléndida Eva Green aprovechada al máximo en toda su extensión de mujer intrigante, misteriosa y fascinante. Como D'Artagnan, el joven músico y actor François Civil se revela por su parte como competente galán y nuevo valor del cine galo, mientras Vincent Cassel compone un Athos atormentado y resignado ante su destino en defensa de la patria.

Alrededor de estos personajes fluye un plantel de primeras figuras del cine francés que encajan a la perfección en sus distintos roles, destacando una vulnerable Vicky Krieps y un confuso e indeciso Louis Garrel como reyes de Francia. La intriga, la traición y la muerte están perfectamente definidas en un conjunto que se disfruta fácilmente, condimentado con una puesta en escena suntuosa y elegante que mira decidiamente al cine actual de gran espectáculo, evidente incluso en su banda sonora, sin renunciar a una manera clásica de hacer cine, cuidando narración y ritmo pero sin grandes subrayados ni momentos de impacto exagerado e insufrible. Destacan las luchas espléndidamente coreografiadas y desarrolladas, mientras el director maneja todos los lujos puestos a su alcance con profesionalidad y pulcritud, habilidad e ingenio, hasta lograr un producto más que digno, seguramente una adaptación fiel y seria del excelente material de partida. Todo eso hace presagiar un satisfactorio Conde de Montecristo, por mucho que sus tres horas de duración se nos hagan a priori cuesta arriba.

lunes, 5 de agosto de 2024

LONGLEGS Un terror satánico bastante artificioso

USA 2024 101 min.
Guion y dirección
Oz Perkins Fotografía Andrés Arochi Música Zilgi Intérpretes Maika Monroe, Nicolas Cage, Blair Underwood, Alicia Witt, Dakota Daulby, Michelle Choi-Lee, Kiernan Shipka, Ava Kelders, Carmel Amit Estreno en Estados Unidos 12 julio 2024; en España 2 agosto 2024

A Oz Perkins la profesión le viene de familia. Hijo de Anthony Perkins, sobrino de Marisa Berenson, curiosamente presente en la cartelera en Dogman, una película con la que ésta coincide en algunos aspectos, religión, pelucas y maltrato infantil por ejemplo, y hermano del compositor de la banda sonora de su película, Elvis Perkins, cuyo nombre artístico es Zilgi, el director parece marcado por la célebre Psicosis que protagonizó su padre, aunque él confiesa que su principal inspiración deviene de La semilla del diablo de Polanski. Lo cierto es que tras tres películas coqueteando con el género del thriller y el terror, ahora parece querer homenajear las películas de asesinos en serie, con Seven y El silencio de los corderos en el horizonte, a la vez que erigirse en otro de los constantes realizadores que pretenden renovar el cine de terror, especialmente el que deriva de las maldiciones satánicas.

Todo eso confluye en una película protagonizada por una surte de agente Starling con síndrome autista, a la que da vida quien podemos considerar nueva musa del cine de terror gracias a sus papeles en El extraño o It Follows, aunque también ha intervenido en otros géneros en su ya dilatada carrera. Nicolas Cage por su parte da rienda suelta a su histrionismo y su pasión por el disfraz, si bien no acierta a generar demasiada inquietud, aunque tampoco acabe de resultar del todo ridículo. Sin embargo el conjunto carece de la garra y la fuerza suficiente para conseguir ser convincente. Demasiado frío para generar angustia, demasiado pulcro y nada inquietante en sus postulados seudorreligiosos.

La idea de relacionar la violencia vicaria con el satanismo podría haber dado mejores resultados sin echar mano de tanto cliché y recurrencia a esa atmósfera fantasmagórica con la que pretende revestirse. Los resultados nos parecen por lo tanto decepcionantes, marcados por unas carencias de guion más que evidentes, resuelto con golpes de efecto tan previsibles como faltos de coherencia. A pesar de todo se agradece que no recurra al habitual tren de la bruja con el que se despachan este tipo de producciones.

DOGMAN Tan maduro como ingenuo

Francia-USA 2023 114 min.
Guion y dirección
Luc Besson Fotografía Colin Wandersman Música Eric Serra Intérpretes Caleb Landry Jones, Jonica T. Gibbs, Christopher Denham, Clemens Schick, Lincoln Powell, Alexander Settineri, Grace Palma, Michael Garza, Josh Charles Aguilar, Marisa Berenson, Emeric Bernard-Jones, Kyran Peet Estreno en el Festival de Venecia 31 agosto 2023; en Francia 27 septiembre 2023; en España 2 agosto 2024

Mucho se habla de lo que se rebaja la cartelera en interés y en calidad en época estival, pero si son películas como ésta las que se estrenan, el tópico se pone en entredicho. Acostumbrados a las fantasías siderales y las aventuras coloristas que nos propone Luc Besson, sorprende la maestría con la que maneja este título de condición tan distinta al resto de su filmografía. Podría decirse de hecho que es su película más madura hasta la fecha, lo que resulta harto paradójico tratándose de una fábula en principio tan infantil y aparentemente ingenua, algo así como un moderno cuento con personajes siniestros, animales inteligentes y cruce sin complejos de diversos géneros cinematográficos.

Dogman ofrece además una nueva oportunidad a Caleb Landry Jones para ser reconocido como el gran actor que es, por si su protagonismo en Nitram de Justin Kurzel, no lo hubiera dejado ya suficientemente claro, tras tantos años de secundario y algún protagonista que no le han reportado la popularidad que merece. En Dogman da vida a un justiciero maltratado por la vida y la familia que se refugia en sus numerosos perros para perpetrar actos teñidos de justicia poética mientras se expone a mafias y especulaciones de diversa índole.

Besson hace gala en esta película de un manejo magistral de la narrativa y la estética, asumiendo la atmósfera de cuento que respira toda la empresa, en la que cabe el thriller, la denuncia social, las capacidades diversas, y hasta el cabaret con drag queens que le brinda la oportunidad de incluir en su banda sonora emocionantes clásicos de Edith Piaf y Marlene Dietrich, convenciéndonos de la habilidad y el buen entendimiento de los canes gracias a ese espíritu de fábula que lo impregna todo y proporciona la magia y el entretenimiento que la cinta demanda. Hay muchos monstruos encerrados en esta película, que no son precisamente su aguerrido protagonista, pero es el tratamiento fílmico por el que ha optado su director el que resta tremendismo y dota al conjunto de ese aire de fábula que le da identidad y presencia.

jueves, 1 de agosto de 2024

NORBERTA Golpe de transgénero

España 2024 88 min.
Dirección
Sonia Escolano y Belén López Albert Guion Sonia Escolano Fotografía David Valldepérez Música Arnau Bataller Intérpretes Luis Bermejo, Adriana Ozores, Mariona Terés, María Romanillos, Adelfa Calvo, Carmen Balagué, María Lanau, Ramón Agirre, Xavier Deltell, César Tormo, Ángeles Ortega, Teresa Lozano Estreno 25 julio 2024


Aunque no es el primer largometraje de Sonia Escolano, sí que es el primero con cierta notoriedad, mientras para su co-directora Belén López Albert supone su debut. Es una pena sin embargo que tratándose de una producción tan aseada y hasta cierto punto ingeniosa, sobre todo en cuanto a su asegurada comicidad, haya sido tan menospreciada a la hora de su distribución, que prácticamente, al menos en Sevilla, la ha condenado al fracaso y la desaparición inmediata de la cartelera.

Trata con seriedad pero sin olvidar su carácter de entretenimiento y diversión, un tema de transexualidad a edad madura, tocando tangencialmente otros como el género fluido, la amistad, los prejuicios sociales y el respeto, especialmente en el seno del matrimonio. Escolano y López no renuncian en ciertos aspectos a la brocha gorda y un evidente tono de sainete, sobre todo en algunos comportamientos tópicos y gracias recurrentes, pero logran en general dotar al conjunto de un toque algo más distinguido y amable que otros productos de semejante corte que sí cuentan con un mayor apoyo mediático y promotor.

Luis Bermejo el personaje de Norberto/a le brinda una nueva oportunidad para demostrar lo buen actor que es, mientras Adriana Ozores refrenda su buen hacer ante la gran pantalla. El resto, un reparto coral estupendo, consigue insuflar de humanidad y buen talante un producto que no debería pasar desapercibido. Es verdad que algunos aspectos están descuidados, como el disparatado plan de atraco que ocupa su tercio final. También es cierto que éste y otro a un supermercado chino protagonizan algunas de las secuencias más divertidas de la función. Barcelona y la música de Arnau Bataller contribuyen además al disfrute amble y despreocupado de esta simpática película.

QUE LA FIESTA CONTINÚE El amor ilusiona más que la política

Título original: Et la fête continue!
Francia 2023 106 min.
Dirección
Roberet Guédiguian Guion Robert Guédiguian y Serge Valletti Fotografía Pierre Milon Música Michel Petrossian Intérpretes Ariane Ascaride, Jean-Pierre Darroussin, Lola Naymark, Robinson Stévenin, Gérard Meylan, Grégoire Leprince-Rinquet, Alice Da Luz, Pauline Caupenne, Jacques Boudet, Xavier Mathieu Estreno en Francia 15 noviembre 2023; en España 25 julio 2024


Fiel a sus valores y principios, la última película de Guédiguian apela a la unidad y la fuerza de la izquierda como único motor de convivencia en solidaridad, igualdad y justicia social. Y lo hace convocándonos a una fiesta que es justamente la que un miserable paisano nuestro pide que se acabe en unas recientes elecciones europeas, por las que un múltiple y presunto criminal esquiva, con la lamentable inmunidad diplomática, los juicios pendientes. A su edad, y visto cómo la sociedad del bienestar (para algunos y algunas, no para todos) sepulta los logros del pasado y amenaza con dilapidar las esperanzas de la clase trabajadora, el director francés se decanta por la serenidad y la madurez para hablarnos fundamentalmente de familia y de amor. La primera como pilar que fundamenta la herencia recibida de quienes sí lucharon por nuestros derechos y nuestras libertades, y como eje alrededor del cual se concentran nuestros anhelos e ilusiones. El segundo como catalizador de nuestras emociones e impulsor de nuestras ansias de vivir.

La protagonista, una perenne en la filmografía del realizador Ariane Ascaride, presta también su gesto sereno, amable pero también crítico, a quien aspira a liderar una imprescindible unión de partidos de izquierdas para combatir la injusticia y dar cabida a más derechos y más beneficiarios de ellos. Justo sucede cuando se ultiman los detalles para la celebración de un homenaje a las víctimas de la desidia política que provocó el derrumbe de varios edificios residenciales vetustos en el corazón de Marsella hace cinco años y a la vista, o más bien el oído, de un busto de Homero. Mientras, desde el origen armenio de su familia se reivindica la diversidad y la multirracialidad de quienes integran un pueblo, se encuentre donde se encuentre. Son cuestiones que siguen preocupándonos, más cuando sobre nosotros y nosotras se cierne de nuevo la amenaza del fascismo al que tan proclive es una nueva juventud más preocupada por cuestiones tan superficiales como el aspecto físico que por problemas reales a los que sí presta atención otra menos numerosa pero más consecuente.

Ante tanta decepción, Rosa, nuestra protagonista, acaba confiando más y refugiándose en el amor, a su familia y a una nueva ilusión romántica, tan serena como ella, tan intelectual como la cultura que apoya las políticas integradoras siempre de izquierdas, nunca del signo contrario, privatizador e individualista. Guédiguian nos convence asñí de que nunca es tarde para comenzar una nueva vida, que no merece la pena perder la ilusión. Si además la película nos brinda la ocasión de volver a disfrutar de Georges Delerue y su precioso Tema de Camille, origina del film de Godard El desprecio, aún mejor.