USA 2014 98 min.
Dirección Robert Stromberg Guión Linda Woolverton Fotografía Dean Semler Música James Newton Howard Intérpretes Angelina Jolie, Elle Fanning, Sharlto Copley, Sam Riley, Brenton Thwaites, Imelda Staunton, Juno Temple, Lesley Manville, Kenneth Cranham, Hannah New Estreno en España 30 mayo 2014
Podríamos situar el origen de esta nueva moda de adaptar clásicos de la animación Disney a personajes de carne y hueso (sobre fondos de fauna y flora digital) en la producción de Universal de Peter Pan que dirigió el australiano P.J.Hogan (La boda de Muriel) en 2003, a la que han seguido títulos como la versión de Alicia en el país de las maravillas que hizo Tim Burton hace cuatro años, Blancanieves y la leyenda del cazador y más recientemente Oz: Un mundo de fantasía, estando detrás de todas ellas, incluida Maléfica, la productora Roth Films. El pretexto es distorsionar el cuento tal como perdura en el imaginario universal, pretendiendo sorprender con ello sin conseguirlo la mayoría de las veces; pero la intención en realidad es, como siempre, hacer caja vendiendo como nuevo lo que no es sino más de lo mismo. Es cierto que todos estos casos constituyen vehículos de indudable entretenimiento, y que en este caso Robert Stromberg, que trabaja en departamentos de efectos visuales desde hace décadas y ha logrado dos Oscar como director artístico (por Avatar y Alicia en el país de las maravillas), pone al servicio todo su indudable talento y saber hacer en su debut como director, logrando una cinta de indudable belleza plástica. A eso hay que añadir el esforzado y muy bien articulado trabajo de interpretación de Angelina Jolie, el respeto tributado al clásico de Disney de 1959, efectos visuales y frases de guión incluidas, a pesar de que la baza argumental en esta ocasión viene de la mano del cambio operado en la bruja protagonista y las razones que la hicieron comportarse como un demonio. La moraleja sería que el malo no nace sino que se hace, un mensaje interesante de cara a justificar la necesidad de un mundo mejor, con mejores oportunidades para todos y todas y con un sistema de valores edificante y bien diseñado de cara a erradicar o al menos reducir la miseria humana. Por lo demás la cinta resulta tan edulcorada y relamida como suele ser habitual en este tipo de empeños, aunque no le vamos a negar haber conseguido impregnarse de abundantes dosis de magia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario