Guión y dirección Marielle Heller, según la novela de Phoebe Gloeckner Fotografía Brandon Trost Música Nate Heller Intérpretes Bel Powley, Alexander Skarsgard, Kristen Wiig, Christopher Meloni, Margarita Levieva, Madeleine Waters, Abby Wait, Quinn Nagle, Austin Lyon Estreno en el Festival de Sundance 24 enero 2015; en el de Berlín 7 febrero 2015; en Estados Unidos 28 agosto 2015; en España 27 noviembre 2015
En su primera película como directora, la joven y habitualmente actriz Marielle Heller adapta un libro de la viñetista Phoebe Glockner que es algo así como un manual sobre el despertar a la sexualidad sin sutilezas ni ñoñerías, sino todo lo contrario, acentuando la luminosidad de una época mágica para cualquiera adolescente que decida abrirse sin miedos ni prejuicios al disfrute de la juventud en todas sus acepciones. Glockner creció en el ambiente cosmopolita del San Francisco de los setenta, donde practicar sexo y consumir droga no tenía tantas connotaciones negativas como ahora. Allí tuvo la oportunidad de codearse con los más vanguardistas artistas del cómic del momento, gracias al novio de su madre, Bob Armstrong, detalle obviado en esta divertida comedia. Él trabajaba con Robert Crumb, el creador de Félix el Gato, a su vez esposo de Aline Kominsky, que junto a Diane Noomin y sus Twisted Sisters se convirtieron en inspiración y objeto de admiración de la jovencita, entonces adolescente, Glockner. Una sorprendente y carismática Bel Powley se convierte en alter ego de la dibujante, y junto a una fascinante fauna de gente divertida y dispuesta a experimentar, entre los que destacan un contenido Alexander Skarsgard y una estupenda Kristen Wiig en las antípodas de La boda de mi mejor amiga, pueblan esta original y fresca comedia, sensación indie del año, premiada en Sundance por su fotografía y en Gijón por su dirección artística, premio compartido con La calle de la amargura de Arturo Ripstein. Precisamente su puesta en escena, combinando a menudo imagen real e ilustraciones de cómic, es una de sus bazas fuertes, en un conjunto tan saludable como estrepitoso, pero sin histerias ni descalabros, sino manteniendo siempre ese tono jovial y desenfadado que vierte un gramo de esperanza sobre la tan depauperada situación de la comedia americana; prueba evidente de que se puede llegar a ser atrevido sin ser obsceno. Ha sido premiada también en Berlín y Edimburgo, y acumula varias nominaciones a los premios Gotham e Independent Spirit.