Bélgica 2021 72 min.
Guion y dirección Laura Wandel Fotografía Frédéric Noirhomme Intérpretes Maya Venderbeque, Günter Duret, Karim Leklou, Laura Verlinden, Sandrine Blancke, Lena Girard Voss, Simon Caundry, Thao Maerten, James Seguy, Naël Ammama, Émile Salamone Estreno en el Festival de Cannes 8 julio 2021 en Bélgica 20 octubre 2021; en España 25 febrero 2022
Sorprendente debut en el que únicamente cabe preguntarse cómo se las ha ingeniado su responsable para lograr de su pequeña protagonista una interpretación tan conmovedora y eficaz. En la estrategia seguida para conseguirlo encontraremos la respuesta para dilucidar si estamos ante una película excepcional o un trabajo limítrofe con la pornografía. Y es que Wandel en su ópera prima retrata a través de la mirada limpia e inocente de una niña de poca edad, que se inicia en el ritual académico, ese mundo hostil al que asomamos al poco de nacer y que nos enfrenta de inmediato a la maldad intrínseca al ser humano cuando aun no ha sido moldeada nuestra personalidad a través de la educación y el amor.
Más que una crónica sobre el abuso infantil en los colegios, más concretamente en el recreo en el que se desarrolla gran parte de la trama, Wandel nos invita a sumergirnos en ese microcosmos, con un rotundo éxito gracias en parte a una cámara agachada a la altura de su pequeña protagonista. Casi desde el inicio comprendemos que esta experiencia inmersiva nos va a provocar una insoportable inquietud, una zozobra casi irrespirable. Nos va a hacer cómplices del drama por el que pasan una hermana y un hermano en los primeros días de colegio de la más pequeña, que ve cómo él es víctima de los irrefrenables abusos de sus compañeros de juego, a la vez que se ve censurada para que no tomar parte en la tragedia y no empeorar así las cosas, solo para comprender que quizás quienes un día fueron víctimas acaben convirtiéndose en verdugos. Es ese pequeño mundo en el que se cocinan nuestras personalidades radica el terror que provoca que de adultos la convivencia sea tan difícil y frecuentemente injusta.
Todo eso lo rueda la novel realizadora con un notable sentido de la austeridad, dejando a lo largo del metraje caer pequeñas pistas que nos horrorizan y nos hacen tomar conciencia de qué es lo que están aprendiendo las nuevas generaciones, cuáles son los mensajes que están recibiendo de sus familias y docentes, qué escuchan en casa, qué viven en clase o en el recreo, y de verdad que da mucho miedo. Ganadora del Premio de la Crítica en la sección Una cierta mirada del Festival de Cannes.