Título original: Les émotifs anonymes
Francia-Bélgica 2010 80 min.
Dirección Jean-Pierre Améris Guión Jean-Pierre Améris y Philippe Blasband Fotografía Gérard Simon Música Pierre Adenot Intérpretes Benoît Poelvoorde, Isabelle Carré, Loretta Cravotta, Lisa Lamétrice, Swann Arlaud, Pierre Niney, Jacques Boudet
Estreno en España 28 octubre 2011
Agradable comedia romántica francesa (y afrancesada) cuya particularidad radica en el carácter paranoico de la pareja protagonista, lo que da lugar a situaciones cómicas, especialmente en sus encuentros y citas, pero también a centrar la carga emotiva y emocional del film. Y es que en sustancia se trata de la paciencia y la complicidad que exige una relación sentimental para llegar a buen puerto. Aceptar a la otra persona, con sus defectos y miserias, forma parte incondicional de la experiencia amorosa, del enamoramiento. Cuando la diferencia hace mella en la persona, y ésta encuentra otra marcada también por la distinción, quizás sea más fácil llegar a ese punto de comprensión y aceptación que exige cualquier relación de cualquier índole. Teniendo en cuenta que en el fondo todos y todas somos diferentes, la ecuación se concluye con que todos estamos obligados a ser condescendientes a la hora de enfrentarnos al amor. Si en el fondo esta amable y sencilla comedia logra dar en la diana, en la forma su realizador ha optado por el estilo colorista, elegante y hasta cursi de un Jacques Demy, incluyendo hasta algún número musical aislado, como cuando la siempre espléndida Isabelle Carré canta y baila en una galería comercial la versión francesa (y afrancesada) de Richard Rodgers y Oscar Hammerstein II I have confidence in me, del musical Sonrisas y lágrimas. Y insisto en lo de “afrancesada” porque este film recupera un estilo meloso y cursilón que ya se hizo patente no sólo en producciones de Demy en los 60 sino también de contemporáneos suyos. Por cierto, su ambientación en el mundo de la fabricación y comercialización del chocolate de repostería es consustancial a ese carácter almibarado pero también amargo del conjunto.
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