Guion y dirección Jesús Pascual Documental Estreno en el Festival de Cine Europeo de Sevilla 7 noviembre 2021
Hemos encontrado en Amazon Prime, tras su estreno en Filmin, este único trabajo hasta el momento del sevillano Jesús Pascual (Alcalá de Guadaira, 1997), en colaboración con el productor Antonio Bonilla, un documental que retrata la Semana Santa de Sevilla desde el punto de vista del marica, término cuyo uso tanto el documental como algunos de sus moradores se encargan de justificar y reivindicar como algo autóctono de lo que sentirse orgulloso y orgullosa. Premiado en Sevilla en la sección Panorama Andaluz de su Festival de Cine, y nominado al Premio Feroz en su momento, el trabajo de Pascual surge de una serie de entrevistas que tuvo con Antonio Millán, conocida como La Palomita de San Gil, ya fallecido; uno de esos personajes que atesoran tanta vida, tantas vivencias, desgracias y alegrías, que sus testimonios acaban reflejando más la verdad de una época como los libros de historia que sólo reflejan la oficial. Estas entrevistas dieron lugar también al trabajo de fin de máster del cineasta, bautizado y comercializado como Querer como las locas.
La semblanza que Pascual hace sin estridencias ni montajes frenéticos, de la Semana Grande sevillana a través de quienes tanto hacen por ella, acaba siendo un lúcido, emotivo y emocionante análisis que abarca varios temas, la trascendencia que tiene la fecha más allá de su componente religioso, las experiencias del colectivo en una ciudad en la que se sintieron cómodos y escapistas cuando la hipocresía les relegaba a labores relacionadas con la Hermandad para la que estaban más cualificados que nadie, y se sienten ahora más cómodas cuando legislación y costumbrismo han deparado un nuevo horizonte de convivencia y sana diversidad.
A lo largo de su más de hora y media de metraje, Pascual entrevista a varios de estos personajes, algunos intelectuales, otros directamente folclóricos o militantes, la mayoría jóvenes, que desgranan con toda la naturalidad que la libertad que les brinda el director les permite, una serie de anécdotas y experiencias entre la emoción y la gracia, siempre presente en un film que celebra la fiesta, la vida, la diversidad y la emoción que todo ello conlleva. Ahora que se aproximan las cofradías, toparnos con este documental quizás nos sirva para verlas de otra manera y disfrutarlas como nunca, aunque algunos no lo llevemos en los genes como estas mariquitas que crecieron a su amparo y con toda la ilusión que aporta. En ese sentido, impagable el recorrido que uno de ellos hacía de niño por su habitación imitando todas las estaciones de penitencia de su virgen favorita.
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