
Bien atento a dinámicas y articulaciones, Axelrod no cayó en la tentación de impregnar el Concierto de Aranjuez de tipismo andaluz, acentuar sus colores y sobreexponer acentos folclóricos. Por el contrario hizo una versión contenida y elegante que acompañó a la guitarra amplificada de un intérprete que se permitió la licencia de explorar nuevas sonoridades, dotar al conjunto de un mayor enfoque flamenco y recrear las cadencias del adagio con una estructura y unas ornamentaciones desconocidas hasta el momento, pero tremendamente efectivas, hasta completar una versión personal y acertada de la celebérrima página. Su particular homenaje a la pieza adopta la forma de un concierto de cosecha propia denominado Diamantes para Aranjuez, en el que toma prestados elementos armónicos y melódicos de la obra de Rodrigo hasta subvertirlos, y que adopta ese estilo característico suyo muy cerca de la música ligera y festivalera, con profusión orquestal, un elevado carácter melódico y el acompañamiento del cajón, de nuevo a cargo de Roberto Vozmediano, que le da al conjunto un sabor muy jocoso. En el adagio Eric Crambes protagonizó una introducción de exacerbado lirismo.
Beethoven volvió a escena con la Sinfonía que más entronca con el espíritu primaveral de la pieza de Rodrigo, la Sexta, a la que Axelrod dedica unas muy expresivas y sentidas palabras en un anexo al programa. Una exposición de motivos para adelantar que la suya pretende ser una visión introspectiva y psicoanalítica del dolor de su autor cuando la pérdida de audición estaba adentrándose por derroteros muy preocupantes. Al margen de si esta intención logró materializarse o no, lo cierto es que el tejano nos ofreció una Pastoral rica en expresividad, profundamente melancólica y de una belleza exultante. A sus órdenes la orquesta, solistas incluidos, ofrecieron una nitidez y una perfección extraordinarias, con especial mención para la cuerda grave, que tanto volumen y solemnidad aportan a las interpretaciones de la ROSS, y los metales, que si aún quedaba alguna duda de su notable mejoría, en esta ocasión demostraron una fuerza imponente y majestuosa sin paliativos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario