Dirección Manuel Martín Cuenca Guion Manuel Martín Cuenca y Lola Mayo Fotografía Eva Díaz Música Vetusta Morla Intérpretes Lupe Mateo Barredo, Fidel Sierra, Cayetano Rodríguez Anglada, Agustín Domínguez, Irka Lugo, Jesús Ortiz, Inés Amueva, José Mª Verdulla Otero Estreno en el Festival de Valladolid 23 octubre 2023; en salas 24 noviembre 2023
La última película de Manuel Martín Cuenca (La flaqueza del bolchevique, Caníbal, El autor y La hija) quizás sea la propuesta más bonita y sentimental de la presente temporada cinematográfica. Con una sensibilidad extrema y una significativa bonhomía, el director almeriense se traslada de su tierra natal que tan bien retrató en la extraordinaria La mitad de Óscar, a la luminosa Cádiz, convirtiéndola en otro personaje entrañable de este cuento precioso sobre una adolescente obligada a ejercer de madre mientras reclama el amor perdido de un padre que prácticamente le ha abandonado a ella y a sus pequeños hermanos.
Cuenca, sabedor de que más de la mitad del éxito de su empresa recabará en sus jóvenes intérpretes, ha tenido el acierto de reclutar a cuatro criaturas adorables, la que da vida al carismático personaje central, sus dos sensacionales hermanitos, cada uno con su particular universo psicológico y ambos con unas energías y ganas de jugar apropiadísimas, y el amigo y compañero de instituto de la joven, a la postre quizás el verdadero amor que necesita esta auténtica princesa de cuento sin título nobiliario. Un padre sentimentalmente desaparecido y una madre áspera y ausente por motivos presuntamente profesionales, condicionan el periplo emocional de esta niña de aparente rictus inexpresivo que sin embargo encierra en su mirada una desazón inusitada que representa a la perfección la inquietud y la incomprensión que deben sentir millones de niños y niñas a quienes unos progenitores irresponsables les hacen víctimas de una trayectoria vital y sentimental injusta y a todas luces inmerecida.
La pericia y el ingenio del director para amasar estos ingredientes argumentales, la naturalidad con la que se prestan todos los personajes de la película, los buenos sentimientos que expiden la mayoría, con la debutante y prometedora Lupe Mateo Barredo a la cabeza, pero incluyendo también unos secundarios muy significativos, como una bogada feminista y un profesor comprometido, consiguen un film que emociona y convence, quizás uno de los títulos más hermosos, sinceros y llenos de esperanza vistos en mucho tiempo.
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