Guion y dirección Corneliu Porumboiu Fotografía Tudor Mircea Intérpretes Vlad Ivanov, Catrinel Marlon, Rodica Lazar, Agsutí Villaronga, Sabin Tambrea, István Teglas, Cristóbal Pinto, Antonio Buíl, George Pistereanu Estreno en el Festival de Cannes 18 mayo 2019; en Rumanía 13 septiembre 2019; en el Festival de Sevilla 9 noviembre 2019
El realizador rumano Corneliu Porumboiu regresa al cine policíaco tras el discreto éxito cosechado hace unos años con Policía, adjetivo. La hermosa isla de La Gomera y la tradición guanche del lenguaje del silbo, con Los silbadores o The Whistlers como título internacional adoptado, se convierten en pretextos para construir una arquetípica trama de crimen y corrupción con la mafia rumana y el narcotráfico como telón de fondo. Un policía con incierto y tormentoso pasado, una femme fatal en toda regla y una serie de canallas de toda índole y condición se reúnen en un ejercicio de estilo tan plúmbeo como falto de cualquier atisbo de glamour, para contar una historia mal gestionada y peor resuelta, en el que los pretextos apuntados se diluyen hasta resultar del todo inútiles y desaprovechados. Cine negro al estilo del antiguo este, y para que no quede duda ahí están esas escenas en televisión que homenajean a los espías del este al estilo de un James Bond cutre y nada sofisticado. Lo peor que le puede ocurrir a un thriller es que se siga sin interés, y a éste eso le pasa prácticamente desde el minuto cero. El conjunto se revela además pretencioso cuando en su banda sonora la Barcarola de Los cuentos de Hoffmann suena recurrentemente entre otros clásicos de Bellini, Weill o Strauss.
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